Identidad y comunicación futbolera.


Desde los inicios del siglo XX la plataforma más eficiente para la comunicación era el afiche simbólico, en donde los artistas ejecutaban técnicas y estilos provenientes de las vanguardias de aquel entonces. En la búsqueda por promocionar los eventos y captar la atención de la sociedad, se incluían personajes con exageraciones corporales como así también la comparación metafórica entre el mundo y el balón de futbol. Luego de 30 años las estrategias fueron enfocadas en generar empatía y así nació Willie, la 1era de 14 mascotas que acompañarían los eventos. 
Hacia 1970 la comunicación visual hace un giro hacia lo icónico y es en donde podemos comenzar a identificar recursos claves del diseño gráfico como, logo e isologo, síntesis visual, improntas y aplicaciones para su fácil recordación. Es el inicio de lo que conocemos como creación de marca e identidad en los mundiales y si bien los posters no se dejaron de crear, quedaron en un segundo plano como un acompañamiento de fuerte impacto publicitario y atractivo artístico.
Durante las siguientes décadas los gajos del balón fueron retratados y evolucionaron como iconos de todos los mundiales. Sin embargo la tipografía no se quedó atrás y acompaño las estructuras dándole forma al conjunto como una marca personal.

 Llegado el año 2002 surgen nuevos cambios, constantes y variables que desestructuran el layout, explorando otras formas y colores. Por un lado el logo se vuelve corporativo compartiendo nombre con la FIFA y por otro el balón deja de ser protagonista.

Se reconocen figuras abstractas, rostros y el trofeo principal convive junto con los elementos como una garantía de calidad.

Podríamos hablar de branding a partir del 2010 que es cuando la implementación de diferentes piezas de comunicación impresas y digitales responden a una coherencia estética, dándole forma a una lenguaje visual.
En el transcurso de los años siguientes el diseño de identidad visual se fortaleció al ritmo de las nuevas tecnologías con distintas plataformas e intervenciones de gran formato.

Consideramos que Rusia 2018 a diferencia de sus antecesores da un paso más allá en la exploración gráfica, apropiándose de una sistema visual contundente e impactante. Es clave lograra empatizar con el usuario y facilitarle información sencilla y recordable para su entendimiento.




A través de la historia visual de los mundiales, la utilización estratégica del diseño gráfico fue mutando según las necesidades, épocas y tecnologías, pero siempre con el objetivo de crear una identidad única y recordable.