Ubicado en Carabelas Buenos Aires el Palacio San Jacinto de la familia Álzaga Unzué, es el reflejo del apogeo y decadencia de la burguesía Argentina.
Cuando nos convocaron para desarrollar una marca que le rinda homenaje a la residencia y transmita aquellos acontecimientos que llevaron a su destrucción, nos encontramos con el desafío de lograr un correlato visual acorde a la línea de vinos orgánicos y clásicos.
Para la línea orgánica nos enfocamos en tres iconos provenientes de la inmensa residencia y retratados con una impronta gráfica estilo “handmade” a dos colores, alejada de las técnicas industriales.
Para la línea clásica elegimos la sobriedad característica que requiere la imagen de estos productos, pero decidimos sutilmente ecualizar los niveles de lectura, tintas y papeles táctiles.
Marco Director Creativo
SoonBranding I 2018
